¡Hola a todos!
Acabo de terminar de pintar esta asquerosa unidad de seguidores del dios de la enfermedad Nurgle. La verdad es que, a pesar de ser una unidad bastante grande (15 miniaturas), la he pintado muy rápido y casi podría decirse que de golpe (aunque ha sido en 4 sesiones diferentes de pintado, en total menos de 9-10 horas). Y ha sido gracias al Quickshade de The Army Painter.
The Army Painter es hoy en día una marca de pinturas, tanto en bote como spray, pinceles, pegamentos, texturas para peanas y una larga lista de útiles accesorios y herramientas para nuestro hobby. Pero cuando nació, se dio a conocer por el que fue su, en principio, único producto: el Quickshade (popularmente conocido como "Army Painter" a secas).
El Quickshade sirve para pintar las miniaturas con el método que popularmente se llama "pintado con betún de judea". Este método de toda la vida, consiste en pintar la miniatura con sus capas de colores base y luego aplicarle una mezcla de barniz (más o menos denso a gusto del pintor) mezclado con betún de judea más o menos rebajado con algún disolvente (esencia de trementina, por ejemplo). De este modo, conseguimos sombreado general en todos los colores de la miniatura al mismo tiempo que la barnizamos para protegerla. En función de la proporción barniz/betún, de lo rebajado que esté el betún, y de las capas que demos, la miniatura se sombreará más o menos. Lo bueno, es que conseguimos miniaturas pintadas rápidamente de un modo más que aceptable como para que se consideren acabadas, pero si queremos, después se puede pintar por encima de la capa de barniz para hacer luces adicionales a la miniatura y darle más detalle.
En mi opinión, el método del betún de judea tiene dos contras: que el barniz tarda mucho en secarse, y que es un engorro preparar la mezcla del betún y el barniz cada vez (porque no es fácil que siempre nos salga la misma proporción de los tres componentes, por lo que puede que haya miniaturas que nos queden con distinto tono que otras; a veces nos quedamos cortos de mezcla y hay que volver a preparar, y otras veces nos sobra...). El Quickshade elimina el segundo contra, ya que viente todo mezclado en un bote suficientemente grande como para durar años. Tiene una característica que cada uno tomará como un pro o un contra según lo que le guste más: el barniz de la mezcla es de acabado brillante. A mí, en general, no me gusta que las miniaturas tengan un acabado brillante, porque me parece muy irreal e innecesario. Sin embargo, en el caso de todo lo que sean miniaturas que hayan de tener un acabado que de sensación "asquerosa" creo que eso es una virtud, ya que así la miniatura parece que está chorreante de babas o cualquier otra sustancia.
De este modo, decidí pintar mis portadores de plaga con el Quickshade. Como la unidad era bastante grande, decidí pintarla en tres tonos diferentes, de modo que cuando la use como una sola unidad no quedará tan monótona, y podré igualmente diferenciar fácilmente tres unidades distintas por sus colores. Pinté las miniaturas de cinco en cinco, de modo que cuando le diera el quickshade a las cinco primeras y hubiera de dejarlo secándose, podría ponerme a pintar el grupo siguiente.
Imprimé todas las miniaturas con un spray Tamiya color Amarillo Oscuro (Dark Yellow). Esta marca de pinturas acrílicas es cara para la cantidad de pintura que viene en sus botes, pero cubre muy bien y deja un acabado que me gusta mucho. Además, tenía un spray que compré para pintar una casco y una réplica de airsoft, así que lo aproveché. Tras ver fotos de portadores de plaga, decidí pintarlas de colores verde, carne putrefacta y carne.
En el caso de todas las miniaturas, tras imprimar pinté uñas, dientes, huesos y cuernos de color Arena Clara de Vallejo (pale sand); las tripas de los portadores de plaga las pinté de color Carne Mate de Vallejo (Flat Flesh) y luego les dí un sombreado con leviathan purple de Citadel; las espadas y el estandarte los pinte con una capa base de Plata de Vallejo (Silver), las sombreé con Naranja Ardiente de Citadel (Fiery Orange) rebajado con agua, un pincel seco de Plata por los filos, y un ñultimo sobreado con Devlan Mud de Citadel; las babas/gotas verdes las pinté con Verde Claro de Vallejo (Light Green); los ojos y las lenguas los pinté con Bermellón de Vallejo (Red).
A los demonios que iban a ir en tono verde, les dí un sombreado generalizado por toda la piel (evitando las demás zonas mencionadas en el párrafo anterior) de Verde Oscuro de Vallejo (Dark Green) rebajado con agua; después del lavado, realcé el color de las pústulas que había por toda la piel de los demonios con Verde Claro de Vallejo rebajado; el mástil del estandarte lo pinté de color Ocre Marrón de Vallejo (Ochre Brown).
A los que iban a ir en tono carne putrefacta, les pinté la piel con Carne Putrefacta de Citadel (Rotting Flesh); después sombreé las zonas de las pústulas con un par de capas de Verde Oscuro de Vallejo muy rebajado con agua.
Por último, a los que iban a ser de color carne, les pinté toda la piel de color Carne Mate de Vallejo y luego la sombreé con Tinta Carne Citadel de las antiguas (Flesh Wash).
En ese punto, fue cuando recibieron la capa de Quickshade. Aunque en las instrucciones diga que hay que sumergir la miniatura en el preparado, yo lo aplico con pincel, de este modo no se desperdicia tanto Quickshade y mancha menos (aunque el pincel hay que limpiarlo muy bien con disolvente). Esperé entonces que se secara (más o menos, un mínimo de ocho horas).
Los detalles que hay que pintar después no fueron muchos: para los ojos, les dí una capa de Amarillo Mate de Vallejo (Flat Yellow) de modo que se viera el rojo alrededor como un cerco, y luego les pinté una pupila vertical con Negro Brillante de Vallejo (Glossy Blacky); las babas/gotas las iluminé con una mezcla a partes iguales de Amarillo Mate y Verde Claro de Vallejo, y les dí una última luz añadiéndole un poco más de amarillo a al mezcla anterior; las lenguas las iluminé con una mezcla a partes iguales de Naranja Ardiente de Citadel y Bermellón de Vallejo, y les dí una última luz con Bermellón de Vallejo.
A las peanas les pegué arena de grano intermedio con cola blanca de carpintero. Una vez estuvo seca, las pinté con Negro de Vallejo (Black) y luego les dí un pincel seco de Arena Clara de Vallejo. El canto lo pinté con Marrón Chocolate de Vallejo (Chocolate Brown). Por último, les pegué con cola blanca de carpintero algunos parches de césped electrostático.
No sé qué os pareceran acabadas, pero a mí personalmente me parece que tienen un acabado muy bueno para ser pintadas con betún y no tener luces adicionales en general (y teniendo en cuenta el poquito tiempo de pintado, poco más de dos horas por cada grupo de cinco). Pero como siempre, el público tiene la palabra... :-D
Sin embargo, con el paso de los años, a base de madurar, leer (no sólo trasfondo sino también novelas... y novelas "normales", que conste...) y aburrirme de pintar berserkers de color rojo (¡qué infierno!), acabé llegando a la conclusión de que si realmente existiera una entidad divina del hedonismo, seguramente sería la que más éxito tendría a la hora de corromper seres humanos.
En aquella época, con el tirón de los suplementos de Index Astartes sacaron varias cajas exclusivas de algunas de las Legiones de la Primera Fundación (tanto leales como traidoras), y una de ellas fue la de los Hijos del Emperador. La verdad es que esa última versión o concepto de marines ruidosos me gustó más que ninguna de las anteriores (los primeros, que llevaban guitarras, o los de segunda edición, que para mi gusto eran demasiado barrocos), ya que eran simplemente marines del Caos con armamento sónico, un modelo de mochila con altavoces y algunas cabezas especialmente "slaaneshcas", pero conservaban esa cierta sobriedad que, en mi opinión, han de tener todos los marines, sean leales o del traidores.
Así se juntaron varios factores azarosos que concluyeron que me hiciera una escuadra de 6 tipejos (el número sagrado de Slaanesh): me encontré en una tienda el nuevo Señor del Caos de Slaanesh, que usaría como paladín, a mitad de precio, tenía cinco marines del Caos multicomponente sin montar, y acababan de reactivar hacía sólo unos meses el servicio de piezas sueltas de GW (una verdadera lástima que lo volviesen a quitar). De ese modo, pedí varias cabezas, destructores y amplificadores sónicos y hombreras con el emblema de los Hijos del Emperador, y así me hice mi escuadra de aniquiladores marines ruidosos. Dos veranos después, durante la campaña de Medusa V (así como la del Ojo del Terror me parece la mejor que ha habido, en mi opinión esta fue de las malillas), sacaron la miniatura de Lucius y me acabé haciendo con ella casi inmediatamente.
